Siete, según los más auténticos budistas, 

son los factores con los que los seres humanos mundanos podemos iluminarnos.

La finalidad de los mismos es crecer interiormente, 

apagando las sombras que habitan en nuestro interior, disipando la oscuridad,

despertando y haciendo que nos iluminemos, 

salgamos de la anestesia colectiva y heredada.

A estos siete factores también se les puede denominar de AUTO DESARROLLO.

Embellecen nuestra vida interior. Dan un sentido noble a la vida.

Nos ayudan en el desarrollo interior. 

Nos permiten crecer espiritualmente, por lo tanto, ser una versión mejorada

de nosotros mismos para las cosas más comunes, en lo más cotidiano del día a día.

Estos siete factores se mejoran, sin duda, con la practica de la meditación.

Y también con vivir una vida "yóguica", meditativa.


Y ..., cinco, son los bloqueadores que nos impiden alcanzar la luz interior.


Quiero en este post compartirlos contigo, (7+5).


1.- ATENCIÓN PLENA

Y es el primero, porque sin este todos los demás no alcanzan su máximo esplendor.

Resulta básico para el desarrollo de las otras cualidades.

Consiste en estar consciente, con deliberación y control, aquí y ahora.

Si no estamos atentos perdemos la relación con la verdadera realidad.

No hay meditación sin atención.

No hay disponibilidad total ante la vida si no somos capaces de conseguir desarrollarnos

en la atención plena consciente.


2.- INVESTIGACIÓN DEL DHAMMA

El dhamma es la enseñanza.

Nos permite no ser ciegos,.

Hace que no nos creamos las cosas tal como nos las cuentan, 

incluso aunque vengan del maestro,

sino ver lo que es, investigando la verdad, des cubriéndola dentro de uno mismo.

Nos acerca al desarrollo del discernimiento, 

que nos permite indagar lo que verdaderamente es.

Reconocer las auténticas enseñanzas sin ser un discípulo ciego.

Vivir con los ojos de la mente bien abiertos.

Aprendiendo sin engatusamientos, sin aturdimientos.

Con la mente clara.


3.- ENERGÍA

El viriya, dirían los budistas.

Se refiere a la determinación o voluntad a través del entusiasmo.

Nada es más poderoso que la fuerza interior bien dirigida.

Lo que no es energía es sólo muerte.

La materia muere, la energía no.

Nos permite avanzar en el desarrollo interior a través del "querer".

Llámale si quieres auto-motivación. La única real que existe.


4.- LA BÚSQUEDA DEL BIENESTAR AUTÉNTICO

Lo llamamos felicidad. Nace del interior. 

No habita fuera de nosotros.

Los budistas le llaman el "piti".

Y nos trae la dicha, la alegría, el contento interior.

No se refiere al estar contento porque ha pasado algo que me trae una buena noticia.

No es el estar feliz, de forma reactiva, porque algo maravilloso o esperado

nos acaba de ocurrir, sino la felicidad que nace de nosotros mismos, proactiva.

El bienestar auténtico no está condicionado por factores externos, 

sino que brota desde nuestro interior.

Nos da aliento para vivir en un estado continuo de esperanza, sin falsas expectativas.


5.-  LA CALMA

Tranquilidad genuina. Serenidad. Quietud. Sosiego.

Calma en movimiento, no entendida como la calma que nos para, 

sino la que nos da la fuerza para seguir.

Genera revelación, capacidad creativa.

Y, al estar en calma, la mente está más atenta, es más limpia, más clara.

Nos permite discernir más, y mejor.


6.- CONCENTRACIÓN

Estar en lo que estás identificándote con lo que estás viviendo.

Necesitamos de una mente concentrada, para que ella misma no nos engañe.

La concentración nos permite no dispersarnos.

Esencial para adentrarnos en el núcleo de la vida y sus acontecimientos.

Nos permite además vivir más en nosotros mismos, 

no tanto dando valor a las circunstancias que nos rodean

sino a las que nosotros creamos.


7.- ECUANIMIDAD

Equilibrio. Ánimo estable y constante. 

"Upekkha" para los budistas.

Pertenece a uno de los 4 estados esenciales de la mente.

Hace que no nos dejemos atrapar por los extremos. 

Nos saca de la mente dual.

Nos hace ser personas más lucidas. 

Se trata de encontrar el centro. Y elegir con una visión clara.

Nace de la lucidez.

Y nos enseña que todo es cambiante, transformador, que está en continua impermanencia.

Todo termina. Todo tiene un fin.


Y, ... cuando no estamos entrenados para vivir bajo estos

siete elementos esclarecedores de la mente, y necesarios para el desarrollo personal,

caemos en los 5 OBSTÁCULOS

impedimentos que, si no los tenemos de forma consciente 

bajo nuestro control, nos alejan de la verdadera luz de la vida.


Son:


SENSUALIDAD

No caer en el error que los sentidos nos generan. 

Cuidado que nos hacen vivir desde el placer o en el dolor, distorsionando la realidad.

No nos dejemos abotargar por ellos.

Si no vigilamos lo que por nuestros sentidos nos llega, 

nos inundaremos de ignorancia.


MALEVOLENCIA

Malas intenciones.

Es malevolente todo aquello que se aleje del sentimiento puro de ayuda y colaboración.

Se aleja del amor, de la compasión.

Se acerca a la crueldad.

Su contrario, desde el lado beneficioso para nosotros y los que nos rodean, 

es la benevolencia.


OBSCINACIÓN 

... de la mente.

Nos empecinamos tanto con algo que no nos deja distinguir la verdad.

Genera obsesión. Adicción. No nos deja ver la totalidad.

Es bueno poner a la mente en tela de juicio.

La mente no trabajada, no entrenada, es discapacitada.

Genera conflicto innecesario y distracción.


AGITACIÓN

Es desasosiego. Es ansiedad. Es vehemencia excesiva. 

Lo experimentamos todas las personas.

Nos aleja del disfrute del momento.

Consiste en desear que acabe lo que está pasando.

Nos aleja de la paciencia.


LA DUDA

No se refiere a la duda positiva.

No se refiere a no cuestionarnos lo sucedido, o lo que está por llegar.

Sólo un imbécil, un tonto, no duda.

Si no pudiésemos dudar, no nos distinguiríamos de cualquier otro animal.

La duda nos hace humanos. Es constructiva. Nos hace indagar.

Pero aquí, este obstáculo se refiere a la duda escéptica.

Escepticismo inútil que nos impide entregarnos a cualquier práctica de desarrollo individual.

Se refiere, a la duda que no nos permite, con perseverancia, seguir en la mejora continua.

Si dudamos del médico, o de su terapia, mejor no ponernos bajo su criterio.

Esta duda destruye la confianza y sin ella se apaga la energía.


Estos cinco obstáculos son stoppers vitales, nos detienen.

Pero si nos enfocamos bien para superarlos, los debilitamos. 

Necesitamos debilitar estos obstáculos 

para así poder vivir en un estado de iluminación, 

en el que aprender, crecer, mejorar y desarrollarnos siempre.

Nuestro objetivo primordial vital debería ser la practica diaria 

de los 7 elementos iluminadores,

ya que nos ayudarían a saltar los muros que estos obstáculos nos crean.

El trabajo de la meditación, y el entrenamiento de la mente, nos permite superarlos.


Se trata de 

AUTOCONOCERNOS

Desarrollar los 7 sentidos de la iluminación vital

es la clave para alcanzar un estado mejor de consciencia.

...Y poder disponer de una mejor vida.

Darle un sentido elevado a la 

E X I S T E N C I A