"nuestro mejor diálogo ha sido el de las miradas"
M. Benedetti


Un sencillo y corto mensaje en este post; una meditación cotidiana para un lunes de calma y calima veraniega:


EL PROBLEMA ESTÁ
EN EL MODO 
EN EL QUE 
VEMOS 
EL PROBLEMA


La forma de "mirar" las cosas cambia el como las vivimos.
Esto ya parece muy obvio...
Pues..., ¿y si cuando sea necesario, aprendemos a cambiar la mirada?

Las miradas dicen lo que el corazón calla.
Y lo que el corazón dice a gritos aunque no se le oiga.
Son el espejo del alma, solemos decir... ¡Que gran verdad popular!
Por eso, quien no comprende una mirada, difícilmente comprenderá una gran explicación.

La vida la construimos según somos capaces de manejar nuestra mirada.
El foco !!!!, ... le llaman los expertos.
A lo que le das permiso de que suceda, sucede. O puede suceder con más probabilidad. 
Normal, toda tu energía la concentras en ello.
Pasa a ser lo importante. A veces, lo único. 
A lo que no pones foco, pones desinterés. 
No hay mirada para ello. Al menos, no una mirada interesada.

Podremos manejarnos con muchas redes sociales, tecnología instantánea, 
medios de comunicación impactantes, smartphones de última generación, ...
pero nada, absolutamente nada, sustituye una mirada.

Pon tu mirada buscando problemas, y tendrás problemas.
Pon tu mirada buscando soluciones, y quizás las alcances, o quizás no, 
... pero tu aproximación al problema será diferente. Lo vivirás diferente.

Cómo miramos lo cambia todo.
Y cómo nos miramos, lo cambia mucho más.
Obsérvate a ti mismo.
En realidad el problema no existe. El problema es una creación nuestra.
Lo que sí existe es una determinada situación.
El problema es la interpretación, creada por nosotros, de esa situación.
De hecho, la misma situación puede ser vivida por una persona de una forma, y por otra de otra.
Para una ser un problema, para otra una solución.

No creo que valga la pena olvidarlo,

la mirada
es 
CREADORA