Ir donde uno no quiere ir.

Avanzar por el camino que uno no quiere.

Comer lo que no te apetece.

Leer lo que no era el momento.

... y un largo etc.

Son el resultado de no saber decir "NO".

De dejar en manos de otros la organización de nuestra vida. El llevar el timón de nuestro barco.

No manejar la voluntad en la dirección esperada, querida.


Debemos a prender a decir no, y sin inmutarnos. Cuando sea necesario.

Ser dueño de nuestros actos, y decisiones, es ser más libres.

Y no está reñido con la mente abierta, capaz de aprender de otros, de probar cosas nuevas, de cambiar, 

y de cambiar de opinión, de evolucionar, ... ¡NO! son hechos complementarios.


¿Cómo será nuestra vida, en lo profesional y en lo personal, 

si no aprendemos a mejorarnos bien con el "no"?

Nos podrían los miedos, las decisiones de otros.

Nos volveríamos emocionalmente, de forma injusta, más dependientes.


Contesta a estas pequeñas cuestiones:

¿Es habitual que digas "sí" cuando querías decir "no"?

¿Complaces, contra tu voluntad y deseo, los intereses de otros?

¿prefieres que decidan por ti en esos temas que para ti son relevantes?

¿Aceptas los sentimientos que otros expresan porque no te atreves a expresar los tuyos?

¿Necesitas con frecuencia la aprobación de los demás?

¿Eres complaciente, cuando no toca serlo?


Ya sabes, depende de lo que hayas contestado, 

te estarás manejando mejor o peor con el "NO" necesario.


Se trata de nos ser un espejo de los demás, sino aprender a ser un@ mism@.


Aprender a decir "NO" cuando es lo que necesitas es el mejor modo de aprender a ser asertivo.

Asertividad es la capacidad de transmitir a otros lo que opinas sobre un hecho, lo que deseas, 

los que sientes, con respeto absoluto y empático por el otro, 

y sin sentirse un@ mism@ incómodo o incomodando a los demás.


Hay dos tipos de asertividad, la llamada Oposición Asertiva

tiene que ver con expresar lo que piensas aunque sea diferente a lo que otros piensan.

Y Aceptación Asertiva, que es la habilidad de comunicar a otros que nos gusta

lo que dice o hace, su conducta, su forma de ver o sentir algo, sus creencias.

Aceptar algo de forma adecuada, también es un modo asertivo de relacionarnos con los demás.


Es de sabios emocionales, en términos de relación con otros, 

aprender a utilizar adecuadamente la oposición o aceptación asertiva.

Evita muchos problemas.


Ya sabes, toca aprender a decir 

¡NO!